Washington, 20 ago (PL) Las inundaciones que afectan a Louisiana son consideradas hoy el peor desastre natural en Estados Unidos desde el huracán Sandy, que mató a unas 200 personas en 2012.
Fuentes de la Cruz Roja calculan que varios miles de personas que lo perdieron todo, debido a intensas lluvias que duraron más de tres días, azotando a un estado que tampoco olvida la catástrofe del huracán Katrina, en 2005.
Las autoridades reportan al menos 13 muertos, miles de damnificados y cuantiosos daños en infraestructura, y el presidente Barack Obama visitará el próximo martes la zona de desastre.
La administración Obama declaró al menos una veintena de distritos en estado de emergencia, y unas 86 mil 500 personas solicitaron ya ayuda federal.